Pabellón XVI Bienal Arquitectura de Chile
Introducción
La respuesta al montaje de la XVI Bienal de Arquitectura comienza con la elección del lugar: El Museo de Arte Contemporáneo del Parque Forestal.
Si bien el edificio no era lo suficientemente grande para emplazar la Bienal, presentaba virtudes de sobra para el evento, un lugar céntrico y con buena accesibilidad, inmerso en el parque más importante de Santiago pero principalmente portador de una de las variables más significativas para este montaje: la posibilidad de extender la convocatoria de la Bienal a la mayor cantidad de personas, no sólo a aquellas ligadas al gremio sino a una población mucho mayor.
Situación
Dentro del espacio dedicado al MAC del Parque Forestal, la “plaza de los malabaristas”, se plantea como la plataforma pública sobre la cual se construye el pabellón temporal externo para la muestra de Arquitectura de la Bienal de Santiago, Chile.
El Parque Forestal está en pleno centro de la capital chilena, bordeando la ribera sur del Río Mapocho.
Concepto
Abrir la muestra en el contexto específico del llamado “Hacia una Arquitectura que Cuide Nuestra Tierra” significaba exponer públicamente en una plaza ligada a un espacio donde las distintas partes de la exposición dieran cabida al intercambio de información abiertamente.
Montaje
El montaje se ciñe a la convocatoria de la bienal.
Desde un comienzo y hasta el final del diseño se persigue la idea de trabajar con elementos reutilizables o reutilizados, desde la estructura del pabellón de las escuelas y sus revestimientos hasta los elementos de montaje y exposición en el interior del museo.
Espacios
La totalidad de las secciones de la Bienal no cabían completamente en el interior del MAC, y eso se sabía de antemano al elegir el lugar. La carencia de espacio en el interior del museo abría la oportunidad, por un lado, de sacar hacia la calle una buena parte de la muestra, aquella que está en manos do quienes tienen más tiempo y energía para generar conocimiento a través de la experimentación, los estudiantes, activando al mismo tiempo la plaza que antecede al museo y que ha sido escenario de continuos eventos públicos ligados a las artes de la representación.
Pabellón
El pabellón de 400 m2, de similares proporciones al espacio central del MAC, contuvo la muestra de las escuelas. Por otro lado, esto liberó de “exposición” al patio central del edificio principal, convirtiéndolo en el gran auditorio que albergó las conferencias del Encuentro Internacional.
El montaje de este pabellón, en base a andamios, se trabajó a modo de una jaula de planta libre sobre la plaza, liberando la mayor cantidad de espacio público para otras actividades tangentes a la bienal.
Desde la plaza se accede a su planta segunda por una escalera ubicada lateralmente y se une al edificio del MAC mediante un paso elevado.
Estructura
La estructura se conforma en base a andamios metálicos.
Materiales
El exterior del pabellón es un tejido de flejes de aluzinc de segunda selección, material que aunque es reciclable, el consumo energético del fundido para dicho reciclaje es tan alto que llega a ser de menor costo medioambiental descartarlo. Hunter Douglas abre una posibilidad de reutilizarlo ahorrando energía.
Aluzinc
Este producto, aleación de aluminio, zinc y silicio que se almacena en carretes, fue utilizado para crear un entretejido de flejes metálicos, entre los perfiles tubulares propios del sistema, dando como resultado una fachada con apariencia de esterilla a gran escala, creando un ambiente de transparencias y opacidades. En esta ocasión se intercalaron cintas lisas estrechas con otras perforadas más anchas.
Alfombra
El pabellón tuvo en su interior una alfombra compuesta por fibras que habían sido recicladas hasta en un 80%. Una vez finalizada la bienal, el 100% de los elementos usados en este pabellón fueron reutilizados.
Cartón corrugado
Las muestras al interior del MAC han sido dispuestas en los salones principales del museo.
Las obras se expusieron sobre un muro de 160 cms de altura, desarrollado en el centro de cada sala, de tal modo que no se tocaron las paredes del edificio.
Sobre dichos muros, compuestos por bloques macizos de cartón corrugado de 40 cms se expusieron las gráficas impresas a la vez que dejaban vanos en los que se ubicaron las maquetas sobre soportes del mismo material, en formatos de 40×40, 40×80 y 40×120 cms..
Los bloques de cartón corrugado no estaban pegados entre si, actuando sólo por peso, lo que posibilitó desarmar el muro y rearmarlo nuevamente en otro lugar.
Módulos de tabiquería mixta de cartón y madera aglomerada de Masisa habilitaron los diferentes espacios del patio central del museo, que se convirtió en el auditorio principal de la bienal.
Tanto en las exposiciones de los salones interiores del MAC como en el Pabellón externo se utilizaron los mismos materiales y sistemas expositivos y el 100% de los mismos fueron reciclados una vez terminada la muestra.