Edificio W.R Grace
Introducción
El edificio W.R Grace, obra del arquitecto Gordon Bunshaft es un rascacielos de 50 plantas y 192 metros de altura situado en el Midtown de Nueva York.
Junto con su hermano el Edificio Solow rompen con el perfil tradicionalmente recto de los rascacielos de la ciudad. Actualmente el edificio pertenece a Brookfield Financial Porperties, L.P aunque son varias las empresas que lo ocupan.
Situación
El emplazamiento del edificio lo encontramos en el numero 41 W 42nd St frente al Bryant Park del cual tiene unas excelentes vistas, en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.
Concepto
Una de las características principales del edificio la encontramos en la silueta de su sección Norte-Sur ya que estas se van estrechando a medida que ganan altura para seguir a partir del piso 20 aproximadamente inalterables hasta el último piso.
Esto da lugar a unas fachadas Norte y Sur verticalmente curvadas en lo que se asemejaría a una asíntota matemática que tiende hacia un valor sin nunca llegar a él dejando que la función se pierda en el infinito.
Este diseño nos recuerda a otro proyecto de Bunshaft, el Edificio Solow. Esto no es ninguna casualidad ya que el arquitecto utilizó para el W.R Grace los planos de fachada iniciales del edificio Solow y que fueron rechazados para este segundo.
Espacios
El uso del edificio es de oficinas en su totalidad.
En un primer momento en el se situaban las oficinas centrales de W.R Grace Corporation quien lo compartía con la Deloitte & Touche Corporation.
A día de hoy el edificio acoge a algunas otras empresas entre las cuales destacan AOL Time Warner y Limited Brands.
En el año 2005 la Ciy University of New York abrió un centro de bienvenida para nuevos estudiantes en la planta baja del edificio. Se trata de unas oficinas donde estudiantes potenciales pueden pueden acudir en busca de información sobre las facilidades de la universidad.
El edificio cuenta con un parking subterráneo con capacidad para 185 vehículos.
Materiales
Las fachadas del edificio están recubiertas con mármol travertino. El color claro del travertino contrasta con el tono oscuro de las ventanas dándole al edificio una luz propia de la que sus vecinos carecen.