Entrada Villa Arito
Introducción
El proyecto consistía en la creación de un nuevo muro exterior y las entradas para peatones y vehículos para una casa construida en el año 1986 en la urbanización de La Levantina en el pueblo de Sitges a 36Km de Barcelona.
En la época en la que se construyó la casa esta estaba rodeada de tierras rurales dedicadas al cultivo de viñas y la densidad de población era muy baja por lo que los vehículos de la casa se aparcaban frente a ella en la vía pública. Los vehículos se guardaban en el interior del recinto de la vivienda sólo cuando iban a permanecer parados un periodo de tiempo superior al habitual.
Con los años y tras la creación de la autopista C-32 con motivo de los juegos olímpicos de 1992 la zona fue ganando popularidad y la densidad de habitantes creció considerablemente hasta el punto del que el trafico y sobre todo el aparcamiento se convirtieron en un problema. El aparcar los vehículos dentro de las parcelas se convirtió en una práctica diaria en la zona.
Es entonces cuando los dueños de la casa, una pareja con un hijo, deciden automatizar el sistema de las puertas de entrada para vehículos ya que la operación de bajarse del coche para abrir la puerta y volver al vehículo, además de molesta, muchas veces daba lugar a pequeños atascos en una calle de entrada no demasiado ancha.
Finalmente se opta por substituir todo el muro y las puertas de entrada tanto de vehículos como de peatones para de ese modo dar solución al problema de los vehículos y a un inminente problema de seguridad debido a la poca altura del muro existente.
Concepto
El promotor de la obra es un gran amante de la arquitectura de Gaudí, y por ese motivo el arquitecto de la vivienda proyectó en el año 1985 un muro de fachada ondulado de baja altura que recordaba al muro de la famosa puerta Gaudí en el Paseo Manuel Girona de Barcelona. El gesto no paso desapercibido a los vecinos de la zona y la casa terminó por conocerse como “la casa del muro” convirtiéndose en parte de la identidad de la casa. Sin embargo esta geometría ondulada estaba comenzando a ser un problema debido a las pocas garantías de seguridad que ofrecía, ya que por sus puntos bajos era fácilmente franqueable.
La necesidad de elevar el muro se hizo evidente, pero sin embargo en la intervención se ponía en peligro un elemento de mucho carácter, casi icónico dentro de su pequeño ámbito.
Finalmente se optó por levantar el muro mayor con geometrías ortogonales que solucionasen el problema de la seguridad y trasladar el elemento singular a la puerta, tramo que en el proyecto original había sido descuidado, por más que se tratase de un guió a la “puerta Gaudí” de Barcelona.
En el nuevo techo se recogen las formas sinuosas que habían caracterizado el muro, pero a la vez se le otorga una apariencia mucho más moderna gracias a la utilización de materiales.
Al cabo de apenas unos meses de finalizarse los trabajos la casa ya se comenzó a conocer como “la casa del techo”.
Estructura y Materiales
El muro
La geometría del muro de mampostería fue modificada para ajustarse al nuevo proyecto para ser posteriormente aplacado en piedra.
La puerta
La puerta tanto para vehículos como la peatonal están fabricadas en acero cortén.
Una vez colocadas se dejo oxidar el material por medios naturales y se emparejo con baños de salfumán.
Una vez oxidado el propio oxido de la capa exterior protege el material aún «sano» de las capas interiores por lo que el mantenimiento, a diferencia de los metales pintados, es mínimo.
De todas formas una vez conseguido el resultado deseado se aplicó una capa de barniz a ambas puertas para evitar que el oxido manchase tanto a los habitantes de la casa al franquearlas como a los peatones que puedan circular por la acera y rozar la estructura.
El techo
El techo consiste en un forjado de hormigón armado donde el perímetro de contención para el hormigón es el mismo perfil de Cortén que le da la forma ondulada.
La parte superior del techo tiene dos ligeras pendientes desde el eje central longitudinal hacia los lados para evitar el embalsamiento del agua de lluvia. Además una vez fraguado el hormigón se barnizó con material impermeable por la parte superior para evitar filtraciones de agua que se hubiesen producido muy probablemente al someter la estructura a periodos de lluvia prolongados debido al su poco espesor.