Basílica Santa María del Mar

Introducción

La Basílica Santa María del Mar, construida en el siglo XIV, es un buen ejemplo del Gótico Catalán. Era el templo de pescadores, mercaderes y armadores en la Barcelona gótica. Contrariamente a la Catedral de Barcelona que se asocia con la nobleza y el alto clero, Santa María del Mar representa la humildad y la fe, fue levantada con “el sudor y trabajo” de los pescadores de la Ribera. La parroquia de Santa María del Mar se convirtió en Basílica entre 1923-1924.

Algunos terremotos e incendios destruyeron buena parte de su legado original, como el altar mayor, también estilo gótico, que resultó completamente destruido durante el incendio de 1939, conjuntamente con el gran órgano.

El 19 de Julio de 1936 la Basílica fue profanada e incendiada, perdiéndose importantes obras de arte y archivos parroquiales. Después de la guerra comienza la restauración parroquial y también la reconstrucción material con la participación de diversos arquitectos y entidades. A partir de 1982 la Dirección General del Patrimonio Artístico de la Generalitat de Catalunya se ha hecho cargo de la restauración.

Construcción

La construcción de la iglesia comenzó en 1329 de la mano de los fieles de la zona del puerto y de la Rivera, los “bastaixos”que fueron quienes la sufragaron. Toda la población del barrio participó activamente en la construcción, llegando a cargar sobre sus espaldas cada una de las piedras del templo.

• En el año 1329 se colocó la primera piedra para la construcción de la Iglesia de Santa María del Mar, en un solar ocupado anteriormente por la trama urbana del barrio de la Ribera, que fue expropiado y sus viviendas derribadas. La obra estuvo a cargo del maestro Bernat de Montagur, secundado por Ramón Despuig.
• En 1340 se construyen los muros superiores, los pilares y la totalidad de las formas de los arcos y torales diafragmáticos, permitiendo la construcción de una cubierta “provisional” de madera.
• En 1360 bajo la cubierta se van cerrando las vueltas, comenzando por las del presbiterio y el primer tramo.
• A finales de 1370 se terminan de cerrar las bóvedas de los tramos 2, 3 y 4.
• En 1383 se coloca la última parte del cuarto tramo.

Situación

La Basílica Santa María del Mar está ubicada en la Plaza de Santa María 1, dando sus fachadas laterales al Carrer Sombrerers por un lado y Carrer de Santa María por el otro, del barrio de la Ribera, Barcelona, Catalunya, España.

El barrio de la Ribera fue el centro comercial de la ciudad durante los siglos XII-XV, perdiendo su importancia cuando el centro económico se trasladó al barrio de la Mercè y al nuevo puerto (XVI).
En el lugar donde ahora se levanta la iglesia hubo, durante los siglos IV-VI, una necrópolis romana que salió a la luz durante las excavaciones de los años sesenta.

Descripción

La entrada se realiza por la puerta principal que se encuentra en el medio de la Nave Mayor. Encima queda el rosetón y a continuación los 5 tramos de las 3 naves. La separación de la nave central de las laterales se realiza mediante las «minses», columnas octogonales y los arcos apuntalados, todo de gran tamaño.

La composición estructural de la basílica, con los muros circundantes que se retraen hasta la parte exterior de los contrafuertes, pone en evidencia la desnudez del paño que forma la pared perimetral y pone fin al nivel de las naves limitando las capillas laterales. El muro interior de las mismas se levanta hasta el terrado que cubre las naves adyacentes y es horadado por grandes ventanas con dos perteluces. En la zona del ábside estas ventanas están coronadas por rosetones.

Fachada

Vista desde el exterior presenta un aspecto macizo y robusto, dominada por las líneas rectas y ventanas alagadas, coronadas con arcos ojivales, elemento técnico característico de la arquitectura gótica. La fachada principal fue realizada durante el siglo XIV. Presenta dos torres gemelas, dos campanarios, uno en cada esquina, octogonales como los pilares estructurales del edificio. En el interior de estas torres se encuentran las escaleras caracol que permiten subir a las terrazas que se ubican sobre las capillas laterales y atravesando puertas al resto de las terrazas.

En el centro de la fachada, enmarcado por dos contrafuertes y sobre la puerta principal, destaca un gran rosetón, con moldura de material y cristales de colores, que transmite gran amplitud al interior de la nave.

Las fachadas laterales son austeras y planas, cerrando los espacios entre contrafuertes y permitiendo la presencia de las capillas interiores. Sobre estos laterales también se han abierto puertas, una sobre la calle Sombrereros y otra en Santa María, frente a la plaza de las Moreras. Posteriormente se abrió una cuarta puerta en el ábside, hacia el Paseo del Borne.

Una singularidad constructiva es la de las gárgolas con forma humana para el desagüe de la cubierta, ubicadas en el medio de cada contrafuerte.

Espacios

Santa María del Mar está formada por tres naves, una central y dos laterales, con deambulatorio y sin crucero. Cada nave está formada por cuatro tramos con el presbiterio por medio y un polígono de siete lados cubierto por una bóveda de crucería y coronado con magníficas llaves de bóveda. La nave central se ilumina mediante óculos abiertos entre las paredes de la nave central y las laterales y por numerosas ventanas distribuidas a lo largo de su perímetro.

Altar mayor

El altar mayor original quedó totalmente destruido durante un incendio y en la restauración realizada en 1966 el arquitecto Francesc Pons-Sorrolla i Arnau elimina los restos dejando en el presbiterio el altar actual con una imagen de la Mare de Déu encima de un pedestal, donde también figura un barco de madera a escala. La imagen era la que estaba en el tímpano de la puerta de la calle Santa María.

Naves laterales

Las naves laterales son casi tan altas como la principal, detalle que la diferencia del estilo gótico centro europeo. A lo largo del perímetro de las naves laterales se abren las 30 capillas, tres en cada tramo entre contrafuertes que sumado a la altura de sus bóvedas les hacen parecer estrechas. En el segundo tramo de las naves, entre capillas, se abren las puertas laterales. Estas capillas están iluminadas con ventanas de arcos ojivales y vitrales. En la parte interior de la fachada principal hay otras cuatro capillas, dos en cada lateral de la entrada, son más altas que las demás y tienen un arco de punto redondo y no de punto de almendra como las demás.

Donde comienza el ábside, en la trama inmediata al último pilar, las capillas se hacen más amplias y con forma de ochava de cinco lados.
En su diseño, con una altura similar entre las tres naves y una separación de 15 metros entre los pilares, el arquitecto ha conseguido transmitir la sensación de amplitud y espacio similar a la que se conseguiría con una sola nave de espacio diáfano.

Campanario

Las torres de tres cuerpos ubicadas en las esquinas de la fachada central contiene los campanarios, y una de ellas un reloj. Son torres octogonales, forma que facilita las aperturas. En dos de los costados de la planta, a la altura de las terrazas, a escalera da acceso a dos rellanos que acceden a los terrados. El suelo de la torre está perforado al medio para permitir el paso de las cuerdas del badajo de las campanas.

Las torres tienen buenos cimientos, según los obreros que instalaron el pararayos e hicieron llegar hasta allí el cable a tierra, formado por adoquines cubiertos con hormigón bien compactado, argamasa y piedras.

La torre de poniente, sobre la calle de los Sombrerers, es la más antigua y hubo que reforzarla porque tenía las campanas más grandes, que sonaban con el toque de batalla. En las partes bajas del muro, se aprovecharon sillares de otros lugares.

Estructura

La estructura de la iglesia es sólida y muy estable, soportando el peso de la construcción los pilares octogonales, muros y contrafuertes que lo transmiten al terreno a través de los cimientos. De estos elementos, los pilares son los más altos y sobre los que descansa mayor peso.
Desde los capiteles de los pilares salen los arcos dobles, formeros y cruceros, con una moldura relativamente pequeña, dado el ancho de 12 metros de la nave.

Las bóvedas de la nave central son de planta cuadrada y la flecha de los arcos de 16 metros. Las bóvedas de las naves laterales son de planta rectangular y tienen un ancho de 6 metros.
Los espacios muertos entre el comienzo de las capillas laterales y la entrada principal es aprovechado para ubicar las escaleras caracol que llevan a las torres.

Pilares

Cada pilar de la nave soporta 500 toneladas, lo que significa una tensión en la base de unos 30kp-cm2. Los pilares de la girola del altar no soportan tanto peso. La piedra de Montjuïc puede llegar a soportar más de 800kp/cm2.

Los pilares están formados por hiladas de cuatro “cuarterones” con una piedra cuadrada ajustada en el centro. Se trata de una estructura masiva, necesaria en estos elementos que soportan gran parte de la estructura de la iglesia, cada uno de los pilares de la nave soporta 500tn en su base.
La estructura de estos sostenes ha sido estudiada en la actualidad con tomografía sísmica, consistente en provocar vibraciones en diversos puntos de una sección del pilar y recoger las señales en muchos puntos de la misma sección. Esta técnica permite conocer la disposición de las masas, piedras y juntas, que forman el pilar.

En la girola del altar hay ocho pilares, que aunque soportan menos peso reúnen las mismas características que los otros ocho que forman los cuatro tramos de la nave central. Desde el suelo hasta el capitel tienen 17 metros de alto y un diámetro de 1.50 metro.
Los capiteles presentan una decoración esculpida en la piedra que con los años fue remarcada con pintura dorada.

Contrafuertes y muros

Los contrafuertes y muros soportan una tensión mucho menor, aproximadamente 1.5 kp/cm2.
Estudios estructurales demuestran que la iglesia fue muy bien diseñada y construida perfectamente equilibrada. Según estos estudios se demuestra que la línea de esfuerzos indica que la carga llega ligeramente descentrada, 4cm, a la base de los pilares y bien equilibrada a la base de los contrafuertes.

Deformaciones

Como toda gran construcción, presenta deformaciones, no es una masa estática, se mueve de forma continua y cada día. Las deformaciones de los edificios pueden ser por varias causas: por el propio peso, durante la construcción y otras veces por terremotos o incendios.

Pilares

Pese a ello Santa María del Mar presenta pocas de estas deformaciones a causa del proceso constructivo, la más llamativa es la ligera inclinación de los pilares en direcciones diferentes.

Torres campanario

Las torres exteriores tienen cierta inclinación, 16 cm, probablemente causada por los terremotos del siglo XV. El cuerpo superior de la misma, reparado en ese mismo siglo, está perfectamente vertical, lo que ha impedido que se siguiera inclinando.

La combinación de desplazamientos, tanto por motivos térmicos como por la dinámica del suelo, provoca un movimiento cónico en las torres, que en verano llega a los 1.5 mm.

Fisuras

Las fisuras causadas por el terremoto de 1428 se abren y cierran diariamente siguiendo las oscilaciones térmicas, en verano el desplazamiento puede llegar a 0.6mm.

Materiales

Para la construcción de la Basílica se extrajeron piedras de las pedreras de Montjuïc, la misma que en la época se utilizaba en Barcelona para todo tipo de construcción. Fueron necesarios 10.000m3 de piedra y aproximadamente 3.000 m3 de mortero. El mortero es una mezcla de cal y arena que endurece lentamente en contacto con el aire.

Los cimientos fueron realizados con 2.500 m3 de piedra, probablemente procedente de las casas prexistentes en el lugar. Cada piedra que forma la estructura de los pilares de la nave pesa 250 kg, peso que se podía manejar fácilmente con las grúas que se utilizaban en aquella época.

Puerta principal

La puerta mayor de la basílica está formada por dos hojas hechas de madera unidas con hojas de palastro que crean un dibujo adecuado para permitir un fuerte claveteado de refuerzo. En la parte alta de cada hoja de la puerta hay dos figuras de bronce que representan cargadores con fardos sobre sus hombros, en honor de los habitantes de la Ribera que acarrearon sobre sus espaldas los materiales para la construcción de la iglesia.

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