Introducción
Con sus treinta plantas y más de doscientos cincuenta metros de altura, Al faisaliah constituye el edificio más alto de Rijadh y lo que caracteriza de modo más evidente su skyline.
Este rascacielos, construido casi completamente con concreto armado, es fruto de la colaboración entre el estudio londinense Norman Foster & Partners y la sociedad Buro Happold consulting engineers.
A las oficinas, que ocupan las treinta plantas, se suma la gran esfera situada sobre el último nivel.
Se trata del «globe» el restaurante más alto del país, constituido a su vez por tres plantas y encerrado en esta gran esfera dorada de veinticuatro metros de diámetro.
Este edificio piramidal caracteriza, por tanto, al panorama de la ciudad saudí, dando la impresión de dominar todo lo que sucede más abajo.
Una arquitectura que caracteriza fuertemente al paisaje urbano, representando al mismo tiempo el impulso de Riyadh hacia la modernidad.
El Complejo
El rascacielos es parte de un complejo más amplio que comprende una gran plaza alzada siete metros del plano de la calle, un lujoso hotel de más de doscientas habitaciones, un centro comercial, un mega aparcamiento con mil doscientas plazas y una zona residencial con unos cien apartamentos.
Situación
El Complejo Al Faisaliyah se encuentra situado en la ciudad de Riad.
Riad, que en arabe significa «Los Jardines» es la capital y la ciudad más grande del Reino de Arabia Saudí, situada en la región del Nejd. También es capital de la provincia de Riad. Está en el centro de la Península Arábiga, en una gran meseta rodeada de oasis y el gran desierto. La importante aridez del suelo saudí hace que el agua tenga que ser traída, en parte, desde el mar del Golfo Pérsico.
Concepto
La estructura piramidal de la torre se nos hace más “amigable” al adoptar sus aristas una ligera curvatura.
Aunque esta pirámide se desarrolle principalmente en altura no deja de tener su parte de homenaje hacia las grande pirámides de Egipto. Al igual que las pirámides de Egipto permanecen en la historia como el recuerdo de una de las mayores civilizaciones de la historia esta nueva pirámide domina la ciudad de Raid, capital de Arabia Saudita, que es a día de hoy uno de los países con más poder e influencia internacional gracias a poseer algunos de los mayores yacimientos de petróleo del planeta.
A nadie se le escapa tampoco la gran esfera situada sobre el último piso de la torre en perfecto equilibrio pero que sin embargo parece que fuese a rodar y caer al mínimo soplo de viento. Las figuras simples como el triangulo y la circunferencia tenían también un importante significado en la civilización egipcia.
Espacios
En la parte superior, en correspondencia con la esfera, la envoltura de cemento asume una consistencia más ligera y cadencioso, con grandes aberturas que ofrecen una amplia vista panorámica de la ciudad.
La parte más interna del edificio está ocupada en cambio por ascensores, espacios técnicos y escaleras.
Sobre la última planta del edifico se sitúa la gran esfera de 24 metros de diámetro donde se ubica el restaurante distribuido en las tres plantas que conforman el interior de la esfera.
Por debajo de la plaza se desarrolla, en cambio, un espacio destinado a sala para banquetes, pero cuya función de uso puede cambiar gracias a una estructuración interior que se vale de paneles desmontables y móviles.
Se trata de un espacio que puede albergar hasta tres mil personas, y se presenta como un enorme espacio abierto, ya que carece totalmente de elementos de sostén intermedio.
Estructura y Materiales
Otro elemento que lo caracteriza es el curso de las fachadas, cuyo perfil ahusado se concluye con un más marcado estrechamiento, que en la parte superior diseña un arco agudo. Las lineas horizontales que conforman los tres bloques de la fachada corresponden a unos parapetos que sobresales del plano de la fachada para protejer a la misma del duro sol que incide durante los 12 meses del año en estas latitudes.
La planta cuadrada de la torre sufre, por tanto, una gradual transformación a lo largo del desarrollo vertical del edificio.
Incluso si se le observa desde el exterior es inevitable percatarse de cómo está estructurado en tres bloques de nueve, diez y once plantas, separados los uno de los otros por vigas «transversales» que transfieren a los pilares las cargas de las columnas.
Para soportar el peso de este enorme edificio se optó por una estructura de hormigón armado casi en la totalidad de la obra.
El material que más se ha usado para las fachadas es el vidrio que confiere a la torre un aspecto especialmente luminoso y ligero, a pesar de sus notables dimensiones; otros materiales utilizados son además la piedra local y la madera, empleados junto al vidrio en un sistema multicapa.
