Arquitecto
Año de Construcción
1953
Área construida
93 m2
Coste
$9.400 USD
Ubicación
Los Ángeles, California, Estados Unidos

Introducción

A excepción de las dos Case Study Houses, la pequeña casa que Koenig proyectó para Jacqueline y Edward Lamel en Glendale en 1953 le dio más publicidad que cualquier otra de sus primeras obras.

La revista /Arts e[ Architecture publico articulos sobre la casa en dos ocasiones, la segunda con fotos de la obra concluida. La casa también fué nombrada en el San Francisco Exa-miner.
Aquel mismo mes, la revista neoyorquina Living For Young Home-makers publicó el proyecto, con un artículo en el que se refería al arquitecto Koenig, una indiscreción que provocó el envío inmediato de un telegrama de Koenig a la directora, Edith Evans, fechado el 23 de enero de 1956: «Muchas gracias por su amable artículo sobre la casa Lamel. ¿Le importa que le corrija dos errores? No tengo el título de arquitecto. La casa cuesta 9.400 dólares, sin contar con el trabajo del propietario.»

Koenig era consciente de la importancia del título de arquitecto. En octubre de 1957, la Junta de Calificaciones del Estado de California le concedió «el derecho a practicar la arquitectura y utilizar el título de arquitecto». El 23 de diciembre del mismo año fue elegido miembro del AIA y, en febrero del año siguiente ingresó en la sección de California del Sur.

Cuando, en agosto de 1958, el edificio fue designado «Casa de la Semana» en el Independent Star-Neivs, ya no era una obra nueva, pero fue la primera vez que Koenig pudo presentar un edificio construido y hacer gala de su título. «A pesar de la construcción de vidrio y acero», escribió Margaret Stovall, «no hay nada frío y desapacible en esta casa contemporánea proyectada por el arquitecto Pierre Koenig, AIA…».

Vale la pena insistir en este récord de publicaciones porque, en cierto sentido, demuestra que Koenig ha alcanzado la mayoría de edad profesional. Ya no era un joven estudiante que proyectaba su propia casa, sino un arquitecto titulado con una filosofía publicada y un historial de clientes.

Hasta cierto punto, era más importante publicar en periódicos y prensa popular que en revistas especializadas de arquitectura, ya que, masque promover sus ideas entre colegas, le interesaba anunciar su profesionalidad a clientes potenciales. Así, la pequeña reseña sobre la casa Lamel aparecida en la revista Sunseten abril de 1959 tenía tanto valor como cualquier anuncio pagado por la United States Steel en una revista de arquitectura, o el artículo de la edición de septiembre de 1957 en L’Architecture d’aujourd’hui en el que se presentaba esta misma obra.

El Proyecto

La obra que había llamado tanto la atención sólo tenía 93 m2, pero su planta lineal y la densa vegetación de su emplazamiento la hacían interesante.

La revista /Arts e[ Architecture publicó unos dibujos del edificio en enero de 1954, haciendo notar que «la estructura es toda de acero». Casi dieciocho meses más tarde, en junio de 1955, la revista volvió a publicar el proyecto, con fotografías del edificio construido, destacando de nuevo su sistema constructivo: «Se utiliza el acero de forma que pueda obtenerse el máximo rendimiento y ahorro de costes.» Teniendo en cuenta que posiblemente fue el propio Koenig quien proporcionó esta descripción, o quizá incluso la misma frase, es evidente que se daba una gran importancia al uso de acero. La prensa popular no desaprovechó la noticia y se apresuró a utilizar la casa Lamel, junto con los edificios de Raphael Sorianoy Archibald Quincy Jones, entre otros, para tratar el tema. Bajo el título «Podría haber una casa de acero… en su futuro más inmediato», Barbara East escribió en el San Francisco Exa-miner aquel septiembre que «como material, el acero es casi tan americano como la tarta de manzana». En febrero de 1956, Esther McCoy escribió un artículo en Los Angeles Examiner, Pictorial Living sobre el interés que despertaba la construcción de edificios de acero en todo el mundo, relacionando la casa Lamel con otras viviendas en México y Australia.

Concepto

«Según Koenig, el acero es un material neutro, pero no frío; es un medio para abrir nuestras casas a la vegetación y permitir que el sol entre en nuestros patios privados.»

En julio de 1957, Esther McCoy, esta vez para Los Angeles Times, había evitado referirse a Koenig como arquitecto aunque el artículo se titulaba «En lo que creo… Una declaración de principios arquitectónicos por Fierre Koenig». Utilizando la casa Lamel como ejemplo, explica a los lectores que «Koenig prefiere exponer la estructura a la vista porque reduce los costes y resulta estéticamente aceptable.» Y de nuevo le cita: «Una buena vivienda no tiene nada que ver con la construcción de acero, pero este material ofrece mejores soluciones.»

Estructura

La estructura de acero de 24×6 metros adoptaba la misma tecnología y escala modular que la casa del propio Koenig, situada más abajo en la misma calle.

El solaren pendiente permitía situar el garaje en voladizo a un extremo en un nivel inferior y en el nivel principal, la trama de 3 metros facilitaba abrir la planta para introducir un patio dentro del sistema estructural, desdibujando la distinción entre espacio interior y exterior.

Todo ello, combinado con la marquesina natural de robles que poblaban el terreno, incrementaba la sensación de espacio doméstico mucho más allá de los límites habituales. Al ser designada «Casa de la Semana», Margaret Stovall comenta la transparencia de la planta: «El edificio de 93 m2 se adapta al solar salpicado de robles con la misma facilidad que una cabaña de madera, ofreciendo un estilo de vida interior-exterior que su predecesora nunca hubiera podido imaginar.»

Planos

Fotos