Duomo de Milano
Introducción
La Catedral de Milán, construcción icónica de la ciudad, dedicada a Santa María Nascente es uno de los edificios más famosos y complejos del mundo, mezcla de gótico tardío, gótico francés y renacentista
Este proyecto se inició en el año 1386 por la ambición del Duque de Milán Gian Galeazzo Visconti y del arzobispo Antonio da Saluzzo que querían darle a la ciudad un monumento religioso digno de su importancia.
Hasta su finalización en 1887, pasó por la mano de diferentes arquitectos, es decir que es un producto de varios ingeniosos, creativos y notables artistas del diseño y la construcción, entre quienes destaca el arquitecto Simón de Arsenigo a quien se le atribuye el primer diseño, pero la dirección técnica cambió muchísimas veces desde su inicio. De Simón de Arsenigo pasó a Nicoló Bonaventura, luego, sucesivamente, a una infinidad de arquitectos, como Juan de Friburgo, Joaquín de Grassi, Enrique de Gmünden, Marco da Corona, Juan Solaro, Pellegrino Pellegrini, etc. No debe olvidarse a Filarete ni al mismo Leonardo da Vinci, que se interesaron por los trabajos que se estaban realizando en la construcción del Duomo, ofreciendo distintas opiniones y consejos. Los detalles finales de la obra se terminaron durante el siglo XX y a pesar de las generaciones todavía quedan algunas estatuas sin esculpir.
Fábrica del Duomo
El Duque Galeazzo creó una institución que llamó «Venerable Fábrica del Duomo» que se hizo responsable de todas las actividades operativas necesarias para la construcción y gracias a la cual esta pudo continuar en los siglos siguientes: extracción del mármol y serizzo, transporte, construcciones, decoraciones, mantenimiento e incluso proyectos y diseños. Esta Fábrica sigue operando en la actualidad, y lo seguirá haciendo en el futuro, asegurando el perpetuo mantenimiento del Duomo.
El Duomo di Milano es considerada la segunda Catedral Católica romana más grande del mundo, después de la de Sevilla. Sobre este tema existen criterios divergentes, ya que están quienes afirman que es la tercera, colocando en primer lugar la Basílica de San Pedro en Roma, pero este edificio no es catedral.
Situación
El plano de la ciudad de Milán con sus calles que salen en forma de radio del Duomo o circundándolo, revela que éste ya constituía el centro de la ciudad en la Antigua Roma, denominada Mediolanum. La Basílica de San Ambrosio fue construida en este sitio a comienzos del siglo V, siéndole agregada en 836 una basílica próxima. Cuando el fuego dañó ambos edificios en 1075 se comenzó a pensar en la construcción de la futura catedral de Milán.
La catedral se levanta en el centro de la Plaza del Duomo, en la ciudad lombarda de Milán, Italia.
Descripción
El Duomo tiene una planta cruciforme, en forma de cruz latina que ocupa una superficie de casi 12000 metros cuadrados, tiene 157 metros de largo, su parte más ancha mide 93 metros en el transepto y puede albergar 40.000 personas en su interior. Destacan sus 135 agujas y la rodean aproximadamente 3400 estatuas, incluidos los 96 gigantes de las gárgolas. La aguja más alta, con la estatua de la Virgen, mide 108 metros.
Su interior tiene una luz particular. Los rayos de luz coloreada que se filtran por los vitrales góticos, verdaderas obras de arte, crean una atmósfera solemne y mística
Accesos
El acceso a la catedral se efectúa a través de cinco grandes puertas de bronce desde la Plaza del Duomo.
Puerta principal
Fue en 1582 cuando se planteó la construcción de las puertas principales del Templo, pero no fue hasta 1628 que se inició su elaboración, y hasta 1908 no se inauguró la puerta principal. Esta puerta está dedicada a la virgen María y cada uno de sus recuadros cuenta un capítulo bíblico que hace alusión a la vida de la virgen. Son el resultado del trabajo de diferentes artistas italianos del XIX y XX.
Los portales están decorados con relieves realizados entre los s. XVI y XVII con diseños de Cerano.
Tejados
Los tejados que se encuentran abiertos al público, permiten una perspectiva cercana de algunas esculturas de gran calidad. Es muy destacado el bosque de pináculos y chapiteles que se puede observar desde los mismos.
El punto más alto del templo es la «La Madonnina», obra en cobre dorado de Giuseppe Perego, colocada en 1774, mide 4,16 metros y está a una altura de 108,5 metros, fue por mucho tiempo el punto más alto de la ciudad. La aguja mayor fue construida entre 1765 y 1769.
Fachadas
El proyecto original de la fachada fue de Pellegrino Pellegrini, conocido como Tibaldi, pero sufrió varias modificaciones. El mismo Napoleón Bonaparte cuando ocupó Milán se interesó por un diseño de Amati. La construcción de la fachada se concretó entre 1805 y 1813 y finalmente fue terminada en 1814, con una superficie de 4500 metros cuadrados y embellecida por centenares de estatuas.
La fachada está dividida en cinco extensiones de arcos de seis contrafuertes decorados con estatuas y coronados por obeliscos.
Ventanas
Sobre cada uno de las puertas de acceso podemos observar ventanas del siglo XVII. La que está sobre el portal mayor, con balcón del 1790 está dominada a su vez, como las dos adyacentes, por otra gran ventana del siglo XIX de estilo gótico.
Espacios
Su construcción la conforman 5 naves, una central y dos laterales a cada lado, descansando sobre 40 columnas de 24.50 metros cada una.
Naves
Nave central
Esta es la más alta de las cinco, con 45 metros de altura atravesada por un transepto seguido por el coro y el ábside.
Esta nave alberga diversos monumentos:
- El presbiterio.
- El Medeghino.
- Los altares de Pellegrini.
- El monumento Arcimboldi.
- El sarcófago de Marco Carelli.
- La estatua de San Bartolomé de Marco D’Agrate.
- El Sarcófago de los arzobispos Ottone y Giovanni Visconti.
- La obra Visita de San Pedro a Santa Agatha encarcelada.
Naves laterales
Estas poseen gran diversidad de frescos suspendidos entre sus enormes pilares como también gigantes rosetones que iluminan sus oscuros pasillos.
Ábside
Nicolò di Bonaventura se encargó del ábside del Duomo, el cual merece una atención muy especial debido a sus tres inmensos ventanales con vidrieras, los cuales son considerados los más altos del mundo.
Entre 1500 y 1510, bajo Ludovico Sforza, fue completada la cúpula octagonal y se decoró su interior con cuatro series de quince estatuas cada una que representan a santos, profetas, sibilas y otros personajes del Viejo Testamento.
Órgano
En 1552, se encargó la construcción de un gran órgano a Giacomo Antegnati que se colocó en el coro norte, y Giuseppe Meda proporcionó cuatro de las dieciséis columnas que decoraron el área del altar, el trabajo fue completado por Federico Borromeo. En 1562 se agregaron el San Bartolomé de Marco d’Agrate y el famoso candelabro Trivulzio.
Materiales
Para los cimientos fueron utilizados más de 1000 metros cúbicos de serizzo, especie de roca granítica que se encuentra en grandes bloques en las canteras, mientras que, para la construcción del templo, fueron necesarios casi 600.000 grandes bloques de mármol de Candoglia.
El Duque Gian Galeazzo decidió donar el mármol de la cava de Candoglia, ubicada en la provincia de Novara, en la comuna de Mergozzo, en aquellos tiempos estas localidades pertenecían al Ducado de Milán. Al fundar La Fábrica del Duomo le confirió el privilegio de “utilizar gratuitamente y en perpetuidad” dicho mármol y también el serrizo. De esta manera el Duque legalizó la donación que había hecho.
Este mármol, ya utilizado por los romanos para construir los arcos de «Porta Ticinese» y «Porta Nuova», es de una calidad excelente, de un color que varía entre el blanco cándido, el rosado o el azul, según la luz que reciba, tiene además una gran resistencia a la intemperie y una estructura muy compacta dotando al edificio de una gran plasticidad. El Duque también donó los gastos de transporte para llevar el material hasta Milán.
La nave central está construida con ladrillo y recubierta de mármol.
La fachada está recubierta de mármol blanco esculpido y las puertas de la fachada principal son de bronce.
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