Gimnasio Club Atlético Paulistano
Introducción
La construcción del Gimnasio para el Club Atlético Paulistano en San Pablo es el resultado del concurso público de anteproyectos presentado por el club en 1958 y ganado por Paulo Mendes da Rocha y Joao Eduardo de Gennaro. Con tan solo 29 años y recién recibido, Mendes presenta su proyecto sin ningún tipo de presión o estilo predefinido, con total libertad y esta frescura seduce al jurado, quien tuvo en cuenta varias variante de parámetro, tales como la buena implantación de los elementos proyectados, armonía con los demás edificios y vegetación existente, buenas visuales y composición plástica y una estructura simple, precisa y bien definida.
“…El jurado considera que este edificio se destaca en gran manera por la simplicidad de la solución, ingeniosidad de la estructura y por su belleza plástica. No obstante la calidad de la solución encontrada, la obra no se resume en una estructura, es una obra de arquitectura……” (parte de la declaración del Jurado)
En la Bienal Internacional de San Pablo, realizada en 1961, la obra recibe el Gran Premio del jurado por el ingenio en el desarrollo de la estructura y su belleza plástica.
Ubicación
El club se encuentra en un terreno ajardinado sobre las calles Colombia y Honduras, exactamente Rua Honduras, 1400 – Jardim América, São Paulo, 01428-001, Brasil . Este sitio de aproximadamente 45.000m2 se ubica a 4km hacia el suroeste del centro de la ciudad, en una zona residencial. El gimnasio se ubicó en la parte oeste del terreno, donde se levantaba la conocida como “sede vieja”, demolida para poder emplazar la nueva construcción. La calle Colombia une la zona alta y baja de la ciudad conectando la conocida Av Paulista, eje financiero y burocrático de la metrópoli.
Concepto
En esta obra temprana el arquitecto comienza a utilizar los que serían sus principales recursos y características a lo largo de su carrera como el planteamiento estructural y la disposición de distintos espacios bajo un mismo techo, en este caso la piscina, las gradas, el gimnasio, las zonas de entretenimiento y demás dependencias, todas alrededor de un jardín interior.
A diferencia de otros gimnasios el proyecto se presenta como un espacio abierto cubierto por una gran plataforma horizontal de hormigón. Las cualidades arquitectónicas claves en el diseño de Mendes da Rocha fueron los pequeños puntos de contacto de las grandes estructuras de hormigón con el suelo, la esbeltez del dosel que permite que la luz penetre en el gimnasio y la falta de umbral entre interior/exterior.
Espacios
La construcción es una transformación del espacio, se crea algo que antes no existía o se transforma lo existente. El hecho de que el programa se presente abierto manifiesta una intención de relacionarse con su entorno, que se reafirma al enterrar la construcción y presentar una explanada que conduce a la misma, permitiendo la libre circulación desde la plaza al programa. La calle llena de tráfico y de actividad comercial local, la explanada y los jardines internos del club, convertidos en áreas interrelacionadas, están diseñados para fomentar otras actividades no necesariamente relacionadas con programas deportivos.
Desde el exterior se accede al gimnasio y se llega a las gradas mediante rampas que descienden levemente desde el nivel de la calle. En esta superficie se albergan espacios para la comunidad donde se realizan eventos y espectáculos, además de las actividades deportivas.
Planta
- explanada exterior
- rampa de acceso por la calle Colombia
- salida jardines del club
- cancha de basket y volley, pista de esgrima, gimnasio
- gradas
- enfermería y administración
- vestuarios
- baños
- bar
- controles luz
En los niveles más altos, alrededor de la pista central se ubican las gradas mas elevadas.
Estructura
El edificio se distingue por una gran claridad estructural, un anillo de hormigón armado con cables pretensados de los que se suspende un techo metálico circular de acero en el centro, permitiendo la entrada de luz natural. Su forma general transmite un sentido de ligereza y transparencia.
La cubierta de hormigón que se despliega sobre el gimnasio descansa sobre 6 grandes soportes trapezoidales portantes de hormigón de los que se desprenden 12 cables de acero para soportar la carga del elemento central de aproximadamente 12.50 metros de ancho. Estos cables que salen desde las 6 columnas perimetrales se disponen de dos en dos. La combinación de estas dos técnicas da al edifico ligereza y calidad tridimensional, agregando un matiz de tecnología. Desde el interior los 6 pilares se ven como un perfil en V bastante abierto.
En la zona donde se desarrollan las funciones del gimnasio, bajo nivel de la calle, se realizó una estructura secundaria que soporta la losa de la explanada superior mediante columnas circulares de 20cm de diámetro y una separación de entre 5/6cm formando un pórtico con paredes de hormigón. Esta estructura suspendida, con un vacío central de aproximadamente 35m de diámetro, permite que quede libre el espacio correspondiente a la arena central y da acceso a dos gradas opuestas colocadas en paralelo a la pista deportiva.
Materiales
En su construcción Mendes sigue las pautas de la “escuela paulista” utilizando en su estructura hormigón armado visto y metal. Todo el perímetro del gimnasio se encuentra abierto lo que permite que además de la luz natural y ventilación se puedan apreciar los tres colores que predominan en el conjunto, la tonalidad gris del hormigón visto, el rojo del interior del gimnasio, pintura de la estructura metálica, y el verde de la vegetación que lo rodea. La cubierta fue revestida con planchas de aluminio hasta donde comienza el anillo central metálico.