Iglesia de Peregrinación de Nevijes
Introducción
Los peregrinos se dirigían a Neviges desde finales del siglo XVIII, cuando la iglesia de la época fue la anfitriona de una Imacculata, un venerado grabado en cobre que representa la Inmaculada Concepción de la Virgen María. La popularidad del sitio demostró ser demasiado grande para el monasterio barroco existente, lo que llevó a la construcción de una estructura anexa a principios del siglo XX. Incluso con esta estructura especialmente diseñada, un aumento en las peregrinaciones después de la Segunda Guerra Mundial volvió a sobrepasar su modesta capacidad. En 1960 se decidió construir una nueva iglesia de peregrinación para hacer frente a la afluencia de visitantes.
En 1962 la Arquidiócesis de Colonia, bajo la iniciativa del arzobispo cardenal Josef Frings, invitó a 17 arquitectos para que presentaran proyectos para levantar una iglesia en el lugar donde en el siglo XVIII un fraile dejó en una pequeña capilla una imagen de la Virgen María.
La Iglesia de María Reina de la Paz más conocida como la Iglesia de Peregrinación de Nevijes o Neviges Mariendom, es uno de los edificios religiosos más venerados del período brutalista en el cual su arquitecto Gottfried Böhm abandona las tradicionales formas arquitectónicas católicas para construir un espacio colosal limitado por ángulos agudos y hormigón visto que destaca entre los tejados de la ciudad medieval alemana.
Ubicación
La Iglesia está ubicada en la cima de uno de los picos de la pequeña aldea de Neviges, Elberfelder Str. 12, 42553 Velbert, cerca de Dusseldorf, Alemania. Velbert es un municipio de Alemania en el Distrito de Mettmann, región administrativa de Düsseldorf, estado de Renania del Norte-Westfalia.
Concepto
A diferencia de los otros arquitectos el proyecto presentado por Böhm desafiaba las formas características de un lugar dedicado al culto religioso. La entrada fue colocada cerca de la estación de tren, evitando el largo recorrido procesional de los peregrinos por el municipio, aunque su construcción se realizó en el pico más alto del lugar teniendo éstos que subir para acceder al templo. Fue el único proyecto que no planteaba aplanar el terreno antes de comenzar la construcción. Su cubierta con agudas formas fue comparada en numerosas ocasiones con tiendas de campaña, aunque también puede interpretarse como una montaña de hormigón con varias capas.
Aunque en un primer momento los jueces del certamen consideraron demasiado exagerado el proyecto finalmente fue seleccionado ya que sus formas podrían simbolizar las andanzas de los peregrinos y en consecuencia ser las adecuadas para una iglesia de peregrinación.
En referencia a sus formas el crítico Jonathan Meades comentó:»…Es un edificio de geometrías emocionantes cuyo exterior toma prestado de formaciones geológicas, capuchas de penitentes y formas que podrían describirse como antropomórficas, para que la humanidad se vea obligada a estar un poco más cincelada…»
Espacios
El proyecto presentado por Gottfried Böhm dio como resultado la segunda iglesia más grande al norte de los Alpes, después de la catedral gótica de Colonia, con capacidad para 800 personas, aunque el número se puede ampliar a 2.200.
La estancia no tiene ningún simbolismo religioso tradicional. Exteriormente el único signo de que esa serie de techos tan agudos y grises es una iglesia es la cruz de metal colocada en el pico más alto.
El ascenso comienza con una gran escalera bordeada por un lado con una pared y por el otro con una serie de pórticos con las oficinas y un primer nivel con módulos circulares apoyados sobre columnas redondas que crean el convento y los espacios donde algunos peregrinos se alojan durante la noche. Al final de las escaleras un pequeño patio conduce a la entrada, un hall con un techo un tanto bajo que crea cierta confusión visual antes de pasar al gran espacio principal. Böhm subrayó la conexión entre “dentro-fuera” con el patio delantero y el interior de la iglesia, a través de la formación del espacio, la elección de materiales y los motivos decorativos. Ya en su interior se tiene la sensación de estar en una plaza pública cubierta, sensación reforzada por la continuación de las farolas urbanas y el suelo con grandes dibujos de ladrillo y hormigón. Desde lo alto se reciben algunos rayos de luz a través de lucernarios y altos ventanales. En el lado derecho tres pisos de galerías permiten al visitante vistas al exterior y proximidad al altar, por el otro lado se tiene acceso a dos capillas, una de las cuales, la Marienkapelle, alberga las reliquias de cobre.
El interior es austero, siguiendo la línea de una nueva arquitectura religiosa menos ornamental. El espacio principal está dominado por un pequeño altar, subiendo dos escalones, que aunque no está alineado con el eje de la entrada principal fue colocado en el centro según deseo del arzobispo Frings. Las paredes en hormigón visto y sin elementos decorativos, solo algunos apliques de luz distribuidos en los grandes muros con cristaleras de vivos colores diseñadas por Böhm, principalmente rojo, azul y verde. Estos vitrales representan una serie de temas marianos, incluida una gran rosa roja, símbolo de la Virgen María, cuyo gran formato, y bajo la incidencia de la luz solar, enfatiza la consagración y dignidad del lugar, absorbiendo la dureza de los muros.
Además de las coloridas vidrieras Böhm puso su toque personal con el diseño de sillas especiales para el lugar, los pomos para las puertas y una composición basada en el Ichthys, símbolo secreto utilizado por los primeros cristianos consistente en dos arcos que se cruzan formando la silueta de un pez. Esta composición fue creada para la capilla Marienkapelle. Esculturas de otros artistas como Elmar Hillebrand se distribuyen por toda la iglesia.
Estructura
Su estructura está compuesta por una serie de cubos y pirámides de hormigón armado con refuerzos de acero a escala de una catedral.
El pasillo central está definido por el altar en el frente y un plano que se extiende hacia las capillas por el lado oeste y a tres ábsides alrededor del altar. La planta está cubierta por techos en forma de pirámides cuyas formas están plegadas y enredadas entre sí colocadas directamente sobre las áreas de la planta baja que cubren.
Durante el proceso de construcción se utilizó un modelo de trabajo de cartón, en la escala de 1:50, que muestra paredes y techos. Este último se podía separar para obtener una vista del interior de la iglesia. Los acabados interiores se moldearon en plastilina y luego se colocaron en el modelo. La posterior preparación de los documentos de construcción y los dibujos detallados se llevaron a cabo in situ, según el progreso de la construcción.
Galerías
Las galerías adquirieron su forma específica durante la fase de planificación y detalle de la construcción por lo cual fue necesario agregar columnas auxiliares a cada lado de las columnas principales. Al mismo tiempo, se introdujeron vigas de soporte en el parapeto, entre las columnas laterales, de modo que el área alrededor de las columnas parecía una torre en la que se habían insertado las galerías. Entre las galerías y el techo, estas dos torres retrocedieron gradualmente hasta el núcleo de la columna de soporte. Los parapetos de la galería obtuvieron numerosas esquinas y los niveles individuales se escalonaron uno contra el otro. Finalmente, durante el desarrollo del diseño, se insertó un tercer nivel de galería más pequeña, sobre las dos torres mencionadas anteriormente, cuya fachada recibió formas que se parecían un poco a balcones y ventanas. Mediante la unión de las dos columnas entró en juego un elemento vertical adicional. Al unir y extender las dos columnas ubicadas entre las torres antes mencionadas, se creó un elemento vertical adicional. Esta composición marcadamente plástica se intensificó por la caída de la luz, que fue atenuada por la disposición de un área de ventana relativamente grande detrás de las galerías.
Materiales
Para la estructura se utilizaron 7.500m3 de hormigón y 510tn de barras de acero. Las superficies se fundieron con tablas de madera para darles la textura rugosa típica de los edificios brutalistas. Algunas áreas fueron luego arenadas, creando una superficie granulada.
Una columna de mármol y uno de los altares son obra del artista Elmar Hillebrand. Markus Gottfried Böhm, hijo del arquitecto, fue responsable de algunas de las pinturas de la iglesia.
Los suelos interiores se realizaron con hormigón y ladrillos, formando grandes dibujos más característicos de una plaza pública que de un templo religioso.
Impermeabilización
Al igual que muchos edificios de la posguerra, el mantenimiento se ha convertido en uno de los principales fallos del edificio. Originalmente diseñada para su uso en verano, la estructura de hormigón no tenía un aislamiento adecuado para mantener el calor durante los meses de invierno. Los residentes locales introdujeron la calefacción y sellaron la parte superior de la estructura. Estas modificaciones alteraron el equilibrio térmico de la iglesia y crearon una separación visual entre la parte alta de las paredes y el techo.
Originalmente el aislamiento del techo debería haberse hecho con placas de espuma de vidrio recubiertas con una capa externa de hormigón protector de 8cm de espesor, pero a medida que la construcción avanzó y era evidente que los muros de hormigón que soportaban parte de la sacristía aguantaban las condiciones climáticas Gottfried Böhm decidió construir los techos sin aislamiento ni impermeabilización, aumentando ligeramente el revestimiento de hormigón en los refuerzos de acero, ya que la iglesia sería utilizada por los peregrinos mayormente en verano
Órgano
En mayo de 2010 se inauguró el órgano cuya construcción a cargo de Seifert Kevelaer se inspira en un órgano construido en 1976 por el constructor de órganos Stockmann. Este instrumento se amplía por un auxiliar con 6 paradas, que puede registrarse de forma independiente tanto en los manuales como en el pedal.