Instituto de Investigación Médica y Salud – SAHMRI
Introducción
El SAHMRI es el resultado de la colaboración entre el arquitecto Woods Bagot y Aurecon, en el diseño de un Instituto de Salud e Investigación para el Gobierno de Australia del Sur. Los 9 módulos dedicados a la investigación darán cabida hasta 700 investigadores que buscan la manera de fomentar la innovación y las mejoras en los servicios de salud, lo que significa mejoras en la salud de toda la comunidad. El equipo de diseño y el de construcción han trabajado en profunda colaboración para crear una instalación flexible, adaptable, saludable y sostenible, que ha sido objeto de una clasificación LEED Gold.
El edificio abierto tanto al público como a los usuarios se levanta, creando un plano parcialmente abierto sobre un paisaje en el que parece flotar. En el edificio se realizan investigaciones interdisciplinarias en colaboración con tres universidades del Sur de Australia y el nuevo Hospital Royal Adelaide. Un segundo edificio SAHMRI para la investigación, conjuntamente con dos centros médicos de formación médica, con varias plantas, propiedad de la Universidad de Australia del Sur y de la Universidad de Adelaide serán construidos en un futuro creando el mayor centro de salud e investigación biomédica del hemisferio sur.
Ubicación
El edificio SAHMRI, que se encuentra en North Terrace, Adelaide, Australia, no está diseñado para integrarse en el horizonte, es un objeto flotante.
North Terrace es una de las cuatro terrazas que congregan la zona de negocios y residencial de Adelaide, la ciudad capital de Australia del Sur y la quinta en tamaño del país. Corre de este a oeste, a lo largo del borde norte de la «milla cuadrada», así llamada a consecuencia de la mina de oro conocida como «Super Pit» que congrega 115 años de historia minera, convirtiendo durante años a esa milla cuadrada en la más rica de la tierra.
De acuerdo con la historia de las progresivas reformas en el sur de Australia, Adelaide ha causado con frecuencia la implementación de iniciativas de sostenibilidad ambiental en el país. Al abordar algunos de los desafíos ambientales que enfrentan las ciudades, los principios energéticos en el trabajo dentro del edificio SAHMRI podrían guiar la trayectoria de sostenibilidad de Adelaide en la próxima década y ofrecer un ejemplo a emular para otras ciudades.
En Australia del Sur, las emisiones de gases de efecto invernadero por persona y por unidad de producto estatal bruto son altas en comparación con el promedio mundial, según la Autoridad de Protección de Medio Ambiente de Australia del Sur. Los principales motivos de estas emisiones son el aumento de población, el transporte con un alto consumo energético y los aires acondicionados en los edificios comerciales y residenciales.
Adelaide ha comenzado una trayectoria para convertirse en una ciudad ecológicamente sostenible, pero necesita más recintos de arquitectura verde baja en carbono para lograr ese objetivo. El edificio SAHMRI podría servir de inspiración para conseguirlo.
Concepto
Las cualidades escultóricas del edificio tienen por objetivo inspirar y promover la función del mismo. La fachada transparente exhibe dos atrios internos, mientras que la forma del edificio se expresa aún más por su singular fachada recubierta con una rejilla triangulada inspirada en la piel de un cono de pino. Esta piel articulada se adapta y responde a su entorno, convirtiéndose en un organismo vivo que responde a la posición del sol.
Según Woods Bagot, el motivo para el diseño del edificio es fomentar la colaboración entre los investigadores, lograda a través de una arquitectura que permite una conexión visual entre los pisos y una escalera de caracol de interconexión.
Espacios
La deslumbrante fachada no permite intuir los estudiados espacios interiores del edificio hasta que se está dentro, empezando por los dos grandes atrios con luz natural. Con nueve módulos totalmente flexibles para laboratorios húmedos y secos, así como viveros, ciclotrón y áreas públicas asociadas, los espacios fueron creados para satisfacer las necesidades actuales y potenciales de los científicos.
Una vez más, la fachada juega un papel muy importante, que permite la máxima luz del día en estas áreas, mientras que la mejora de puntos de vista externos crean un ambiente interno saludable. Los arquitectos sugieren que las particiones de vidrio, atrios abiertos y puentes, como la conexión visual entre los pisos y una escalera de caracol de interconexión fomentarán la conectividad y la colaboración entre los investigadores que trabajan en el centro. La fachada transparente promueve vistas externas de los investigadores de SAHMRI, elevando la importancia de las actividades que realizan, y por lo tanto, la función global del edificio.
Los espacios cerrados de apoyo de laboratorio están ubicados a lo largo de la fachada occidental para proporcionar protección contra el fuerte sol de la tarde.
SAHMRI tiene capacidad para 675 investigadores, disponiendo de 25.000m2 de superficie para investigación médica. La instalación está situada al lado del nuevo Hospital Royal Adelaide, compartiendo la explanada de entrada.
Estructura
Fachada
La escultórica fachada del edificio, diseñado en colaboración con Aurecon, presenta un frente fuerte, un signo revelador de la visión de SAHMRI para facilitar la vanguardia en salud y revertir la investigación médica en bienestar para toda la población.
La fachada estructural integrada, también actúa como un para-sol articulado que no sólo controla la luz, sino también la carga de calor, el deslumbramiento y la desviación del viento. Después de un intensivo análisis ambiental con consultores de Atelier 10, Woods Bagot utiliza herramientas de modelado paramétrico para integrar en la fachada las exigencias medioambientales, programáticas y formales.
Marco estructural
Desde el principio, la arquitectura y la ingeniería estructural se reunieron para asegurar un camino claro en la construcción de un edificio funcional y emblemático. De esta unión resultó un diseño con una delicada forma estética geométrica, utilizando la teoría euclidiana simple de las ligeras cubiertas que se suelen utilizar en los estadios modernos. Esta técnica permitió la utilización de una “forma estructural activa” para la distribución de cargas, permitiendo el uso de pequeños elementos rectangulares de acero huecos que permiten el libre paso de luz natural a través de los grandes espacios del edificio. Las 36 columnas que hubiesen sido necesarias para sostener las plantas superiores fueron reducidas a 6 soportes principales ubicados a nivel de la plaza, al ser reducido el peso de la estructura de acero que deben soportar en aproximadamente 250tn.
La solución de diseño, además, crea la ilusión de que el edificio flota por encima del suelo, mejorando la visión arquitectónica al no dar la espalda a la ciudad por ninguno de sus lados.
Tecnología BIM
Para coordinar la compleja forma estructural e integrarla con los servicios que se requieren, para un centro de este calibre, se recurrió a un enfoque de diseño BIM. El modelo resultante después de que todos los consultores combinaran sus requerimientos fue el adoptado definitivamente por todo el equipo, coordinando disciplinas, resolviendo conflictos y planificando el proyecto, tanto antes como durante la construcción. Procesos tradicionales no hubieran podido diseñar esta compleja geometría y curvatura estructural, mientras que con el enfoque BIM se pudo aplicar con éxito una ingeniería en la que participaron más de 14.000 triángulos y perfiles de acero extremadamente estrechos, 150mm de profundidad, a lo largo de 35m.
Materiales
Inspirada en la piel de un cono de pino, la fachada diagrid triangulada responde al ambiente como un organismo vivo. Respirando vida hacia el paisaje urbano, las ventanas puntiagudas contienen 6.290 paneles de vidrio triangulares que brillan con el sol.
La compleja estructura de la fachada es una combinación de un sub-marco estructural diagrid de acero con un baño externo de aluminio y paneles triangulares de doble acristalamiento, paneles de malla tejida y sólidos paneles perforados de aluminio.
La rejilla de acero estructural se extiende hasta 35 metros sin apoyo adicional y tiene menos energía incorporada que si hubiera sido hecha de aluminio únicamente. Los protectores solares se han diseñado y orientado para la eficiencia térmica y lumínica óptima, reduciendo a su vez la carga de calor y el deslumbramiento, variando por ello los tamaños y haciendo que sea casi imposible registrar la escala precisa del edificio.
Uso de energía
El edificio de laboratorios minimiza el uso de energía con un sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado de alta eficiencia energética, con altos niveles de aprovechamiento del aire exterior, algo que todavía es inusual para los laboratorios. La entrada de aire fresco se realiza a través de los frescos jardines de la plaza y mediante un sub-laberinto que enfría el aire de forma natural. Un sistema “inteligente” ayuda a mejorar la eficiencia energética. Otras características incluyen la recolección de agua de lluvia y la reutilización de agua tratada.