MUMOK, Museo de Arte Moderno Kunst Stiftung Ludwig Wien
Introducción
En 1986 se convocó a concurso para transformar la zona Hofställgebude de la ciudad, siendo completados los trabajos del Barrio de los Museos en 2001. Las tres nuevas estructuras que más destacan son el hogar de las más prominentes instituciones del nuevo barrio, el Museo Leopold, el MUMOK (Museo de Arte Moderno Kunst Stiftung Ludwig Wien) y el Kunsthalle. El resto de los edificios históricos fueron transformados para dar cabida a numerosos espacios culturales y artísticos.
El estudio de arquitectura Ortner&Ortner ha integrado con éxito este nuevo edificio en el área artística multidisciplinar que le rodea, pese a que conserva su propio carácter individual. Un bloque oscuro y cerrado, una llamativa estructura con una cubierta curva que se inclina hacia abajo en las esquinas y una cáscara de 12cm de espesor realizada con piedras de lava basáltica que encierran los espacios expositivos del Museo de Arte Moderno de Viena.
Se trata del mayor museo de Arte Moderno en Europa Central, haciendo accesible los diversos aspectos de la vanguardia internacional y austríaca a todos los interesados en las artes.
Situación
El Museo fue construido en Museumsplatz 1, en el medio del MuseumsQuartiers Wien, el Barrio de los Museos de Viena, Austria. Este barrio (The Museumsquartier) ocupa un área de 60.000 m², la 8va zona en superficie cultural en el mundo, en el 7º distrito de la ciudad.
El Museumsquartier
La interacción entre la arquitectura histórica y contemporánea, tanto en el exterior como en el interior de los edificios define al Barrio de los Museos de Viena. Conviven edificios del siglo XVIII y XX con la arquitectura museística contemporánea creando un entorno arquitectónico único en su tipo. La mezcla de edificios históricos con la moderna arquitectura de los museos también queda reflejada en los diferentes espacios para eventos que pueden ser alquilados por el público. Todo el complejo se caracteriza por un ambiente único que combina tecnología de vanguardia con arquitectura barroca para ofrecer una amplia variedad de actividades culturales durante todo el año, tanto interiores como exteriores, danza al aire libre, proyectos expositivos y numerosos programas que crean un ambiente cultural y artístico para quien quiera disfrutarlo.
Concepto
El revestimiento oscuro de sus muros, realizado con antracita gris, material que también recubre las superficies del techo, crean la apariencia de que el edificio emerge desde las profundidades, claramente separado del nivel adyacente.
Los redondeados bordes del edificio, en contraste con la luminosa angulosidad distintiva del cercano Museo Leopold, crean la impresión de que la estructura se encuentra todavía en proceso de formación.
Espacios
Desde la plaza se accede al edificio mediante una escalera exterior blanca, con 10m de ancho, que deja al visitante en la entrada, a cuatro metros sobre el nivel del patio, el centro del edificio en términos de espacios expositivos. Por encima hay dos plantas de exposición y por debajo otras dos. La conexión existente entre las grandes unidades interiores permite un máximo de flexibilidad. Debajo de la escalera se sitúa un área para eventos, con entrada y usos independientes del museo.
En el interior, un hall iluminado desde arriba divide todos los niveles en dos grupos de salas, con superficies diferentes. A un lado del hall de entrada, espacios expositivos de 5m de altura, libres de columnas y con superficies de 700m2 cada uno se superponen, son los mayores espacios expositivos del museo. Estas áreas pueden subdividirse de manera flexible, según las necesidades de las muestras. Al otro lado del hall, los espacios son más íntimos, salas de 250m2 con techos de 3.50m de altura. El museo ofrece 4.800 m² de espacio expositivo.
Entre los espacios expositivos, en el medio del abierto hall de entrada con sus 35m de alto, se ubican son ascensores para los visitantes y el montacargas. Además de los ascensores, los diferentes niveles están conectados por pasarelas.
En un lateral del vestíbulo se ubica la tienda del museo y en el entresuelo un café. Las oficinas administrativas están en un ala adyacente del viejo edificio, pero conectadas por un pasaje elevado que se puede ver desde la plaza, en cambio las zonas de entrega y áreas de talleres también ubicadas en el antiguo edificio, en el Ala Oval, se conectan con el nuevo museo mediante un túnel subterráneo. Existe otro nivel de sótano, 1.800 m², que es utilizado como depósito y para los servicios del edificio.
Desde 2011, también se ha ubicado una sala de cine dentro de los 4800 m² de construcción. Fue diseñada por el artista Heimo Zobernig y presenta las muchas conexiones existentes entre las artes visuales y el cine.
Estructura
El volumen paralelepípedo del MUMOK, que ocupa una superficie de 30x50m, tiene la apariencia de una gran caja perforada por un número limitado de aberturas. Su sección superior termina en una especie de vela-cúpula apoyada en un techo de crucería. La sección inferior está «hundida» en la tierra, separada de la superficie de patio.
Las paredes y el techo que componen la cáscara del edificio forman una serie continua con esquinas redondeadas en grados variables, a partir de 30º de radio para las que suben hasta desaparecer en la parte superior del edificio donde enlazan con las superficies abovedadas. El oscuro revestimiento utilizado por O&O priva, en cierto modo y a primera vista, de la escala dimensional del edificio, ocultando su sección espacial interior pero a su vez recreando ante el observador el diseño gráfico formado por las propias placas basálticas que con ayuda de precisos cálculos matemáticos crea una estética digital interrumpida de tanto en tanto por pequeñas ranuras o aberturas, articulaciones y cambios de tonos.
La entrada al museo ha sido creada retrayendo un hueco en la fachada, mientras que la única excepción visual en toda la composición es una ventana a ras de la pared, en el nivel superior, a través del cual la los visitantes pueden ver desde el interior de la exposición el Kaiserforum. El marco de soporte de carga del edificio se compone de una serie de muros de hormigón armado que dividen el volumen en diferentes niveles y espacios: las salas de exposiciones, espacios flexibles y neutrales; dos pasillos laterales y un área escenográfica con altos techos y muros revestidos con piedra basáltica combinada con piezas de hierro fundido y vidrio templado.
Materiales
Los espacios están equipados con un sofisticado y flexible sistema de iluminación artificial que permite crear las condiciones óptimas de presentación. La sala superior recibe luz natural a través de una gran abertura en el techo curvo. Las salas también cuentan con aberturas en forma de ranuras y una ventana panorámica en la planta superior que permiten a los visitantes observar el exterior a la vez que proporciona un sentido de la orientación.
Tanto en las fachadas y el techo, como en las paredes y suelos del vestíbulo se ha utilizado piedra basáltica de lava, en tonos grises. En las zonas expositivas los suelos son de terrazo, al igual que en el resto de las zonas comunes.
El hierro fundido aparece en las pasarelas, las escaleras y los paneles que revisten el núcleo de acceso al vestíbulo. Las barandillas y barreras son de vidrio templado.
Losas basálticas
Las superficies de las fachadas exteriores, formadas por losas basálticas de 12 cm de grosor obtenidas usando una hoja de sierra con punta de diamante, son porosas y poco brillantes. Su brillante color antracita sólo se puede apreciar cuando las paredes están húmedas.
El patrón de la disposición del revestimiento está dado por la superposición de diferentes capas de piedra, las bandas horizontales aumentan de tamaño a medida que se asciende por la fachada, mientras que las juntas verticales entre las losas, abiertas en el lado izquierdo para crear un efecto de gravado claroscuro, son de dos tamaños y profundidades, 10 y 70 mm. Esta refinada “marca de agua” producida digitalmente se puede apreciar por el sistema utilizado para su montaje que coloca las losas de piedra de igual tamaño pero diferentes tonos en una misma fila, otorgando a la superficie un vibrante aspecto claroscuro, casi como una serie de mega-píxeles.
El resultado es un agradable efecto dinámico que otorga carácter al diseño de esta casa de arte, este «almacén inteligente», en palabras de Ortner & Ortner.
Video