Water Cube
Introducción
La ciudad de Pekín se viste de gala para acoger los juegos olímpicos del 2008. Para ello los arquitectos más prestigiosos del planeta despliegan sus últimas y más asombrosas creaciones por la ciudad.
El complejo para deportes acuáticos que se ha ganado el sobrenombre de “Water Cube” es sin duda uno de ellos.
La instalación fue ganada tras un concurso en julio de 2003 por el consocio formado por el China State Construction and Engineering Corporation (CSCEC) y los grupos australianos PTW Architects y Ove Arup.
Dispondrá de 6.000 localidades fijas a las que se unirán 11.000 localidades temporales durante la disputa de los Juegos. En su interior dispone de 70.000 metros cuadrados de instalaciones con 15.000 metros cuadrados en el subterráneo.
Financiación
Entre sus particularidades está el método de financiación del proyecto, puesto que ha sido pagado enteramente por la donación de chinos emigrantes en el exterior.
Actualmente se calcula que hay más de 60 millones de chinos viviendo en otros países. Entre ellos han reunido los más de 140 millones de dólares que ha costado la obra. 25 de ellos aportados por el millonario de Hong Kong Henry Folk y su familia.
Ubicación
Está ubicado en la parte oeste del Parque Olímpico, a un lado del espectacular Estadio Nacional diseñado por Herzog & de Meuron. Cubrirá un área de 70 mil metros cuadrados.
Concepto
Agua por dentro y agua por fuera. Ese es el concepto en el que se basaron los creadores del Water Cube.
Querían que el edificio reflejase lo que iba a ocurrir en su interior que era ni más ni menos que agua. Para ello nada mejor que un edificio con una estructura basada en las burbujas que crea el jabón mezclado con el agua forrado con una capa blanda y amorfa como el agua que crean la sensación de que el edificio entero este realizado en este material básico para la vida.
La sensación que se tiene al mirar este edificio es como si se hubiese colocado un cubo lleno de agua contra el suelo y este se hubiese retirado como si de un molde se tratara dejando el volumen de agua flotando en el aire por unos instantes.
ETFE
La mayor peculiaridad de la instalación es la estructura exterior formada por 634 membranas traslúcidas, hinchadas con aire a baja presión, de un polímero llamado ETFE (etileno-tetra-fluoro-etileno) que recubren una superficie total de 100.000 metros cuadrados componiendo 3.000 burbujas y le dan un aspecto característico permitiendo una excelente luminosidad en el conjunto de la instalación pero también filtrando los rayos ultravioletas.
Iluminación
De noche dispondrá de una novedosa iluminación formada por diodos luminiscentes (Leds) que ahorran hasta un 60% de la energía consumida por los clásicos fuorescentes y que permitirán iluminar el edificio en 16,7 millones de tonos.
Ecológico
El proyecto ha sido desarrollado bajo la premisa de ser lo más sostenible respecto a los recursos utilizados y respetuoso con el medio ambiente. De esta manera, la energía que utiliza es solar y se ha conseguido que los procesos de depuración del agua aseguren una reutilización del orden del 80%, además el edificio aprovecha y se aprovisiona del agua de lluvia.
Estructura
El edificio se sustenta con un sistema estructural de acero y hormigón único que sigue la lógica de las burbujas, creando una estructura tridimensional de 6.700 toneladas de acero que semejaría a una formación de burbujas de jabón en una tina de baño.
Para evitar la corrosión del acero en un ambiete tan húmedo este se recubrió con una base rica en Zinc.
Mas allá de la búsqueda estética de los arquitectos, el sistema resulto el ideal para una ciudad como Beijing con constantes movimientos telúricos.
Materiales
La estructura de de hormigón y acero (6.700 toneladas) mientras que el recubrimiento lo crean membranas traslucidas de ETFE (etileno-tetra-fluoro-etileno).