Biblioteca Pública en Gando
Introducción
La Biblioteca Pública diseñada por Diebedo Kere es una adición a la Escuela Primaria, construida en 2001 por el mismo arquitecto y a la ampliación realizada unos años después.
El objetivo del proyecto es enfatizar el uso de materiales locales como madera de eucalipto, vasijas de barro o ladrillos de tierra comprimida, para inspirar a los usuarios y cambiar las actitudes locales hacia la arquitectura.
La biblioteca mantiene los materiales utilizados en la construcción de la escuela, pero cambia de una geometría ortogonal a una elíptica, más común en la zona.
Ubicación
El edificio de la biblioteca crea una conexión física entre la escuela primaria y su posterior extensión, construidas en Gando, la aldea natal de Diebedo Francis Kere, Burkina Faso, a 200km de Uagadugú, capital del país.
Concepto
El espacio está destinado a unir los métodos de enseñanza tradicionales entre ancianos y niños con el entorno de aprendizaje estandarizado de las escuelas. Además de apoyar las necesidades educativas de los niños de Gando, la Biblioteca también pretende ser un centro de recursos para el pueblo en su conjunto proporcionando un entorno sustancialmente mejorado para la transferencia de conocimientos.
En las zonas rurales de Burkina Faso la tasa de alfabetización es de aproximadamente un 25%. La Biblioteca fue creada con la finalidad de crear un edificio inspirador que fomente el aprendizaje y no sólo almacenara libros, sino que proporcione acceso a Internet y ofrezca un lugar adecuado para estudiar.
Descripción
La geometría de la biblioteca es formalmente distinta de las demás construcciones del complejo, adoptando una forma elíptica más orgánica que recuerda a las viviendas vernáculas tradicionales de la región. Una pared de ladrillo elíptica, desplazada de la línea central del marco del techo constituye el principal espacio protegido de la biblioteca.
Además de servir como conexión física entre la Escuela Primaria y su extensión, el edificio de la Biblioteca protege el patio de los polvorientos vientos del este.
El techo de la Biblioteca Escolar utiliza una artesanía ampliamente reconocida: las ollas de barro de producción local. Tradicionalmente construidas a mano por las mujeres del pueblo, las vasijas de barro se serraban por la mitad y luego se hundían en el techo. Estas aberturas circulares crean un patrón lúdico e introducen luz natural y ventilación pasiva dentro de la Biblioteca.
Un techo voladizo de chapa corrugada se asienta sobre un marco metálico que se apoya en este techo, protegiendo el interior y los espacios circundantes del sol y la lluvia. El efecto de chimenea creado por la superficie de metal caliente atrae aire más frío desde las ventanas y lo expulsa a través de las perforaciones en el techo. Esto proporciona una estrategia de refrigeración pasiva sin el uso de electricidad.
El área de estudio que rodea la biblioteca está sombreada y protegida por una pantalla transparente de columnas de eucalipto que definen una zona de amortiguamiento entre el exterior y el interior. Generalmente se piensa que el eucalipto es una mala hierba porque proporciona muy poca sombra y absorbe la humedad del suelo. Esta planta resistente y de rápido crecimiento es un material de construcción apropiado para un país como Burkina Faso, que sufre de desertificación debido a la deforestación. Los elementos de la fachada de eucalipto también se utilizan para formar rincones para sentarse y relajarse a la sombra.
Construcción
El edificio fue construido en dos partes. La primera fase, completada en 2012, es el núcleo interior. Una estructura circular que permite que el aire fluya a través de aberturas en el techo.
La segunda fase implica la construcción de una fachada que envuelve el edificio y proporciona refugio y un área para sentarse a la sombra.
Materiales
Para la construcción se utilizan los mismos materiales que en los edificios anteriores, para las paredes bloques compactados de arcilla local, losa de hormigón y un marco estructural de acero para apoyar las chapas corrugadas.
Las vasijas cortadas son embutidas sobre la losa de hormigón y protegidas por un techo en voladizo de chapa corrugada que se extiende más allá del edificio de la biblioteca para apoyarse en finas y numerosas columnas de eucalipto local, madera que nunca se había tenido en cuenta como material de construcción adecuado en la zona.