Fábrica Verseidag
Introducción
Este es el único proyecto industrial que Mies van der Rohe desarrollaría en toda su carrera. El arquitecto recibió el encargo de Hermann Lange, quien según algunos historiadores, sería el responsable de poner en contacto a Mies con el Dr. Georg von Schnitzer, comisario alemán de la Exposición Internacional de Barcelona de 1929, donde Mies realizaría uno de sus proyectos más famosos, el Pabellón Alemán.
Este proyecto fue un encargo de la importante compañía de tejido de seda Verseidag (Vereinigte Seidenwebereien AG), ubicada en la ciudad de Krefeld, Alemania. Mies realizaría dos edificios y asesoraría a la compañía en la creación del resto del conjunto industrial. Tras años de abandono de la fábrica, debido a la segunda guerra mundial y a épocas de baja producción para la compañía, el conjunto fue relanzado como el Parque de negocios Ludwig Mies van der Rohe.
Situación
La fábrica se encuentra en Krefeld, una ciudad cercana a Düsseldorf, en Alemania, concretamente hacia el oeste en un área industrial de la ciudad.
Concepto
El proyecto consiste en una serie de edificios aislados que forman un conjunto. Mies van der Rohe es responsable del Edificio HE, de cuatro plantas de altura, y del almacén adjunto a éste. Además de los planes originales, se conservan perspectivas algo posteriores, realizadas por el estudio de Mies, que muestran una extensión del proyecto. Uno de los puntos clave es, no solo la arquitectura en sí, sino la disposición de los distintos edificios y la relación de unos respecto a los otros.
El proyecto de la fábrica Verseidag sienta las bases tanto arquitectónicas como de organización urbana que Mies desarrollaría después en proyectos como el Campus del IIT o Lafayette Park. La utilización de un diseño muy depurado formalmente en la barandilla de las escaleras así como los pilares de acero en forma de H son algunos de los ejemplos de este aspecto pionero del proyecto en la obra del arquitecto.
“El que construye una fábrica como si de un templo se tratase miente y desfigura el paisaje” – Mies van der Rohe
El arquitecto quiso plantear el proyecto de la manera más objetiva posible, no queriendo regirse por reglas o imposiciones clásicas. Sin embargo, si analizamos el proyecto detenidamente, podemos observar que Mies sí que utilizó en él reglas de articulación y proporciones clásicas. El marco estructural del Edificio HE se muestra en su fachada norte y marca el ritmo compositivo de éste. Otros elementos menores como los bajantes, colocados a un ritmo de 1-2-3-2-1, colaboran también en la composición ordenada de la fachada.
Mies también adoptó aquí el estilo de la Bauhaus, siguiendo modelos como la arquitectura de Peter Behrens.
“Ya que la auténtica aproximación a la arquitectura debería ser siempre objetiva, encontramos que la única solución válida de ese tiempo es ésta en esos casos donde limites objetivos son impuestos y no hay oportunidad para la licencia subjetiva. Esto es cierto en el campo de los edificios industriales. Es suficiente recordar las significantes creaciones de Peter Behrens para la industria eléctrica” – Mies van der Rohe
Historia
Josef Esters y Hermann Lange formaron la compañía Verseidag en los años 20 uniendo varias fábricas de la región. Tras haber contratado a Mies van der Rohe para que les construyera dos casas, la Casa Lange y la Casa Esters en 1928-1930, volvieron a confiar en el arquitecto para llevar a cabo el proyecto de su nueva fábrica.
Mies recibió el encargo en 1930 y lo desarrolló en dos fases, el Edificio HE en 1931 y el Edificio de teñido en 1935. En el proyecto le ayudó uno de sus pupilos, Erich Holthoff, quien acabaría formando parte del departamento de construcción de Verseidag. Las demás extensiones del proyecto fueron llevadas a cabo hasta 1937 por el departamento técnico de la compañía siguiendo el lenguaje formal y el modelo de los edificios originales de Mies. El arquitecto fue consultado tanto sobre estas ampliaciones del complejo industrial así como sobre el tratamiento de los espacios exteriores. La fábrica creció y prosperó hasta 1939.
Durante el trascurso de la Segunda Guerra Mundial el conjunto fue gravemente dañado. En los años 70 volvió a utilizarse como espacio de oficinas, aunque los trabajos de restauración se adecuaron poco al diseño original de Mies.
El proyecto fue declarado edificio histórico en 1999, protegiéndolo así de más deterioro. Cuando el inversor Reinhard Leendertz visitó el lugar el aspecto de la fábrica no podía ser más desolador. Sin embargo, al entrar en el Edificio HE la arquitectura de Mies le cautivó. Leendertz adquirió la fábrica y se propuso crear el Parque de negocios Ludwig Mies van der Rohe. Poco tiempo después, el arquitecto Karl-Heinrich Eick junto con el estudio de interiorismo Raumkontor, llevaron a cabo la restauración de todo el conjunto recuperando el concepto de planta abierta de Mies. Entre las tareas que se llevaron a cabo se incluyen la restauración de los elementos originales, la adición de aislamiento térmico, la adecuación de los espacios a los nuevos usos respetando la configuración original del proyecto y la adición de acristalamientos dobles. Para asegurar la diferenciación de las partes originales de las nuevas se optó por la utilización de distintos materiales. Para mantener el concepto de espacio abierto las nuevas particiones interiores se diseñaron con bandas acristaladas en su parte superior para permitir la visualización de la continuidad del espacio.
Hoy en día el Parque de negocios Ludwig Mies van der Rohe alberga oficinas de varias empresas, mezclando en un mismo lugar arquitectura, arte, cultura, comunicación y negocios.
Espacio
Edificio HE (1931)
Este edificio, de planta prácticamente rectangular, a excepción de un pequeño saliente que alberga una escalera de emergencia, se presenta al visitante de la fábrica como un volumen rectangular al acercarse a él desde la entrada del complejo. Aunque el edificio es entendido como un volumen exento, éste está en realidad conectado con la planta de teñido. Ambos se diferencian fácilmente por tratarse de dos tipologías diferentes, tanto volumétricamente como en cuanto al programa funcional que desarrollan. El espacio de transición que los une es llamado en los planos del proyecto como “espacio de conexión”, mostrando que la voluntad inicial del proyecto era precisamente esa, conectar los dos volúmenes considerándolos dos edificios independientes. Este espacio de unión es aprovechado para albergar la rampa de entrega de mercancías.
Este edificio se organiza a través de una estructura reticular rectangular. Los núcleos de escaleras de sitúan en los extremos del edificio, siendo especialmente singular la escalera de hormigón inscrita entre paredes de ladrillo visto situada al este. Su aspecto original se ha conservado hasta el día de hoy.
Este edificio era utilizado para el almacenaje de las telas para su posterior teñido en el edificio anexo.
El edificio de cuatro plantas está separado del suelo mediante una fina base de ladrillo, único punto en fachada donde el arquitecto usa este material.
Las dos últimas plantas del edificio fueron añadidas en 1935. Las vigas de esta ampliación cubren los 20 metros que configuran la anchura total del edificio. De esta manera, en la planta superior, se pudo crear un espacio libre de columnas, desvirtuado lamentablemente en posteriores modificaciones del espacio.
Los cerramientos de todo el edificio han sido reemplazados en las diferentes remodelaciones que ha sufrido el edificio. Solo cinco ventanas originales perviven y reflejan la delgadez de los perfiles metálicos originales en contraposición a los perfiles modernos de más envergadura. La adición de persianas también ha modificado el aspecto general del edificio alterando la proporción aparente de las ventanas. En el espacio de la escalera principal lo cristales han sido reemplazados por cristales tintados y el alfeizar de las ventanas ha sido elevado.
Edificio de teñido (1935)
En este edificio se llevaba a cabo el teñido de las telas. Este edificio cuenta con un espacio principal diáfano bajo una cubierta de sierra. La cubierta, con sus aberturas orientadas a norte, permite la entrada de luz difusa y homogénea, la más adecuada para este espacio de trabajo.
Edificio de la caldera (1932)
Fue construido entre 1932 y 1936 por el departamento técnico de la compañía Verseidag. La estructura es de hormigón armado y la fachada de ladrillo, por lo que se trata de un edificio totalmente diferente al resto de edificios que conforman la fábrica. Con unas medidas de 38×28 metros y una altura de 17.5 metros, el punto más destacado de este edificio es la chimenea de 75 metros, que se convertiría en uno de los hitos de la fábrica. En 1959-1960 la sala de caldeas y turbinas pasó de utilizar carbón a usar petróleo por lo que algunas modificaciones tuvieron que llevarse a cabo. Éstas, sin embargo, no alteraron demasiado la esencia del edificio.
Edificio del reloj e inspección de mercancías (1932)
El edificio de planta en forma de L se sitúa frente al Edificio HE junto con el cual forma un patio de entrada a los espacios de oficinas de la fábrica. En la parte superior de su esquina norte se sitúa un gran reloj, elemento que le da el nombre al edificio construido por Erich Holthoff. El edificio sigue las directrices arquitectónicas de la Bauhaus tal y como lo hacen los edificios de Mies van der Rohe en este complejo. Esta homogeneidad de estilo hace que todos los edificios se entiendan como un conjunto único y en harmonía. En la remodelación de la fábrica llevada a cabo en 1999 también se incluyó este edificio.
La casa del portero ( 1935-1936)
Diseñada por Erich Holthoff en 1935-1936, el edificio de una sola planta asume la estética del Edificio HE de Mies van der Rohe. Tras los daños sufridos durante la segunda guerra mundial, el edificio fue restaurado por el propio arquitecto Erich Holthoff. Durante la creación del Parque de negocios Ludwig Mies van der Rohe el edificio volvió a ser restaurado.
Parque de negocios Ludwig Mies van der Rohe (1999)
El Parque de negocios Ludwig Mies van der Rohe se caracteriza hoy en día por su concepto de planta abierta, su iluminación natural y sus grandes espacios de almacenaje. El complejo acoge oficinas, despachos y amplias estancias dedicadas a la celebración de eventos, exposiciones, películas y sesiones de fotos.
Estructura y materiales
Tanto el Edificio HE como el Edificio de teñido tienen estructura de acero. Las vigas en I de la cubierta en sierra son vistas a diferencia de las del Edificio HE. Mies quiso dotar ambos edificios de una estructura lo más clara posible, ubicando en un mismo plano estructura y cerramiento. Anteriormente, en proyectos como el Pabellón de Barcelona o la Casa Tugendhat, el arquitecto había utilizado pilares en forma de cruz. Éstos debían ser exentos, por lo que se diferenciaban de la envolvente y se convertían en protagonistas de los espacios. En esta ocasión Mies opta por perfiles más fácilmente integrables en la envolvente y particiones, lo cual facilita un espacio libre de obstáculos. Esto supone además que el protagonista del edificio deja de ser sus elementos arquitectónicos y pasa a ser el espacio diáfano en sí mismo. Así, la fábrica Verseidag supone un punto de inflexión en el tema de la estructura y el inicio del modelo que utilizaría en sus proyectos en Estados Unidos.
Además del acero para la estructura, el arquitecto utilizó hormigón para las escaleras del edificio HE, roble para los suelos, ladrillo y cristal.
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