Introducción
El «Edificio de oficinas de hormigón armado» (1923) había sido proyectado para un solar determinado, hoy día desconocido en el centro de Berlín.
Al contrario de los dos proyectos predecesores (los dos rascacielos), considerados como prototipos, el dibujo para este edificio de oficinas representa un modelo nuevo para un tipo de construcción ya existente.
Concepto
Mies propuso una arquitectura liberada de todo tipo de ornamento, determinada exclusivamente por su funcionalidad y estructura.
El proyecto podría estar inspirado en el Edificio Larkin de Frank Lloyd Wright realizado en 1903. Como en los edificios de Wright, aquí también los muros de la fachada se convierten en espacio que acoge al gran número de armarios-archivador, imprescindibles para las empresas comerciales modernas, iluminado en toda su amplitud por la luz que se filtra a través de bandas de ventanas de gran altura.
El edificio de oficinas de hormigón refleja la eficacia del moderno capital industrial y propaga la arquitectura como vehículo para su aumento. Al igual que la cercana Academia de la Construcción de Schinkel, no se trata de una fábrica o de un edificio típicamente burgués. Más bien representaba un nuevo prototipo que elevó a estos dos a una categoría y que simbolizaba de esta manera la forma y esencia del trabajo de oficina del siglo XX.
Estructura
El edificio de hormigón debía descansar sobre soportes de hormigón y vigas en voladizo que, a su vez, debían soportar las plataformas de cada uno de los pisos. En las plantas superiores, las vigas sobresalen, con lo que no sólo se consigue una superficie mayor, sino que la impresión óptica, a su vez, evita un paralelepípedo exacto desde el punto de vista matemático.
La representación gráfica de Mies recuerda, por lo demás, al sistema de construcción de hormigón armado, desarrollado por Francois Hennebique y realizado por primera vez a finales del siglo XIX. Esta técnica de construcción era característica de grandes almacenes y fábricas. La posición de las ventanas horizontales en el proyecto de Mies muestra que los muros no son de carga.
