Cabanon de Vacances
Introducción
Se construyo entre los años 1951-1952; es el lugar donde Le Corbusier prefería pasar los veranos en los meses de agosto y septiembre. Anteriormente en 1949, Le Corbusier conoció a Thomas Rebutato, futuro dueño de Unité de camping (1957) y propietario del bar que se sitúa a lado de la cabaña de vacaciones desde donde tenía un acceso directo.
Se realizo en paralelo al proyecto de Chandigarh y a la finalización de la construcción de la Unidad de Habitación de Marsella. Forma parte de un conjunto de construcciones agrupadas alrededor de Létoile de Mer, que consta por algunas cabinas de camping.
Le Corbusier solía decir: “Tengo un castillo en la Costa Azul que tiene 3,66 metros por 3,66 metros. La hice para mi mujer y es un lugar extravagante de confort y gentileza. Está ubicada en Roquebrune, sobre un sendero que llega casi al mar. Una puerta minúscula, una escalera exigua y el acceso a una cabaña incrustada debajo de los viñedos. Solamente el sitio es grandioso, un golfo soberbio con acantilados abruptos”
Situación
El cabanon se sitúa en la localidad de Roquebrune-Cap Martin, Francia. En esta ubicación se encuetran las siguientes estructructuras:
- Unidades de camping
- Restaurante
- Cabaña
- Taller
- Casa de Eileen Gray
Concepto
Elevada en una estructura de concreto; esta cabaña se prefabrico en la Ciudad de Ajaccio (Córsega). Es uno de los proyectos realizado completamente en madera. Fue diseñado basado en el «Modulor», un sistema de medidas directamente relacionadas con la escala humana, inventada por Le Corbusier. Se considera una simplificación de su pensamiento y postura sobre la arquitectura, ya que el “cabanon” ha sido un ejercicio brillante de modulación en un micro espacio, es una célula que resume la idea de la máquina de vivir.
Espacios
Es una cabaña prefabricada con medidas en un modulo de 3.66 x 3.66 m y de 2.66 m de altura. Salvo con un desfase para cumplir con los reglamentos de construcción, cuenta con un corredor de 0.70 m después del acceso principal, así como una puerta que colinda directamente con el bar L´etoile de mer.
Después del acceso principal el corredor esta rematado con un armario para los abrigos, e inmediatamente a la derecha se encuentra la entrada a la cabina donde se desarrolla la actividad, esta disposición refleja una circulación helicoidal, que Le Corbusier genera a partir del mobiliario.
Considerada como una célula, una sola pieza con el mobiliario mínimo donde podemos encontrar: dos camas, una mesa con un pie de pivote, armarios empotrados, dos cubos de madera que se utilizan como sillas, un pequeño y redondo fregadero de acero inoxidable detrás de una bajada sanitaria, un wc; además de contar con una serie de ventilaciones y pinturas de su autor.
Las ventanas de la Cabanon brindan una composición armoniosa dentro de la modulación de la casa, teniendo dos ventana de 0.70×0.70 m y otra de 0.30×0.70 m, todas localizadas para dotar a la cabaña de vistas panorámicas del suroeste y el sureste de la bahía.
Aún si quedaran cerradas estas ventanas, Le Corbusier habría dotado de dos aberturas en fachada muy esbeltas, en esquinas contrarias y a un costado, para generar de la máxima ventilación a esa pequeña célula.
Estructura – Materiales
Al ver que los niveles en Roquebrune-Cap Martin, eran muy marcados, Le Corbusier decidió hacer una plancha de concreto que diera nivel para librar de toda incomodidad al asentamiento de la madera del Cabanon. El piso es de duela pintado de amarillo.
Toda la Cabaña es de madera, como habíamos mencionado a base de un modulo de 3.66×3.66m, hecha con bastidores de madera y paneles prefabricados, recubre en el exterior los muros a base de corteza de tronco para dar una apariencia vernácula.
En el interior nos muestra las divisiones que coinciden con los espacios que genera el acomodo del mobiliario, así como las ventanas de 0.70×0.70m y 0.30×0.30m y las aberturas de ventilación que tienen aproximadamente con 0.15×1.05m. Todas ellas rematadas con un marco de madera alrededor que muestra el grosor de los muros de la cabaña.
Le Corbusier corona estos muros en la parte superior con una viga de remate que recibe la cubierta inclinada, resolviendo así el problema que generaría tener un falso plafón de madera dentro de la cabaña para sentir el espacio absolutamente modulado. Esta cubierta está hecha a base de lamina de asbesto, se encuentra inclinada para un rápido desazolve del agua .
Por último Le Corbusier no dejo de lado las pinturas y colores que darían significados dentro de este pequeño sitio. En el muro de la entrada podemos ver dibujos que guardan la existencia de la puerta de comunicación con el Bar L´etoile de mer. Por otro lado tanto el suelo y la modulación del plafón tienen un juego cromático donde podemos resaltar colores como el amarillo, el verde, el blanco y el rojo. No olvidándonos de la cortina de terciopelo que usa para delimitar el espacio del wc y el resto del lugar.